Las rebajas de verano, que tradicionalmente se han desarrollado entre el 1 de julio y el 31 de agosto aunque en la actualidad cada comercio establece sus propios periodos, son siempre una buena oportunidad para comprar esas zapatillas que necesitamos, adquirir una nueva televisión de alta definición y jubilar la antigua o cambiar esa lavadora que ya empieza a darnos problemas.

Este periodo de ofertas y promociones se presenta marcado por la inflación. Los precios de los bienes y servicios han repuntado en mayo hasta el 3,6%, mermando de esta forma la capacidad económica de los consumidores españoles.