Las potencias emergentes se convierten en grandes potencias en el
momento en que pasan de ser los mayores consumidores de materias primas a
convertirse en productores de calidad de esos mismos bienes. Y China, que en 2010 superó a Japón como segunda economía del mundo, solo por detrás de Estados Unidos, es ya un productor vinícola de calidad. Ayer, la prestigiosa revista de vino inglesa, presentó en una gala en la Royal Opera House de Londres los ganadores de sus premios anuale.